El clásico lógico

En el partido del sábado, el Barça impuso la ley del más fuerte. En el terreno de juego se colocaron los dos clubs que están encabezando sin piedad la liga más desigualada de la que yo tengo memoria. Para mi, en el Real Madrid hay visos de que la cosa puede mejorar y funcionar, pero viéndolos también tenía la sensación contínua de ver unos jugadores tensos y ansiosos, incapaces de hincarle el diente a un rival que prácticamente no da opción de competir a nadie.
Quiero destacar varios puntos de vista del partido. Primero empiezo Valdés. Está enorme, por si alguien no lo había notado. Siempre ha sido un portero de gran nivel, lo que le ha valido el mantenerse bajo los palos del Camp Nou tantos años... pero su progresión en cuanto a reflejos, decisión y peso en el equipo está siendo muy grande, y creo que esta temporada es uno de los primeros factores clave de los triunfos que se está labrando el equipo. Por supuesto creo que está entre los mejores porteros de España y ha de ir al Mundial sí o sí. Sin exagerar, si fuese por el momento de forma, creo que incluso podría discutirse la titularidad de Casillas. A Íker lo vi fantástico, como siempre, paró mucho y no pudo hacer nada en los 2 goles. Creo que están muy igualados Íker y Víctor actualmente.
En defensa me llamó la atención la mala actitud de Ramos, al que siempre he visto mejor en la selección que en el Real Madrid. Creo que Sergio se vio desbordado y no debió acabar el partido. Del Barcelona Piqué estuvo sensacional manteniendo a raya a Cristiano, no le dejó respirar. Un dato que me ha fascinado: Piqué no hizo ni una sola falta en los 90 minutos.
En el centro del campo Xavi distribuyó sin problemas porque Gago y Marcelo no dieron la talla, perdían más balones que los que recuperaban, les perdieron los nervios.
En la delantera se demostró quién es más efectivo en las grandes citas. Messi, hizo lo que se esperaba de él y volvió a marcar, y Pedro sigue con sus goles en los momentos decisivos.
En mi opinión se volvió a poner de manifiesto cual es el equipo más fuerte. Y la razón para mi no es que la generación de futbolistas que forma el Barcelona tiene inculcado que la intensidad en todos los partidos, y el fomento de la confianza en el compañero y el juego en equipo es la clave para que los mecanismos del juego se desarrollen y el conjunto funcione sin fisuras, para que la máquina sea productiva. Un proyecto es igual a tiempo, tanto en la vida como en el fútbol, y darle continuidad, confianza, es vital para obtener resultados.