La experiencia es un grado. Para algunos.

Son ciertas las palabras de Laudrup sobre la acción de Belenguer: "Fue listo, algo normal cuando tienes años." Pero no debe de ser tan normal, porque anoche, cerca de un córner del Bernabéu, se agrupaban tras un gol anulado decenas de años de experiencia en el fútbol. Jugadores como Raúl, Robben, ... celebraban un tanto que no había subido al marcador, configurando un perverso efecto contrario. En el área del Getafe, mientras tanto, se encontraba también un hombre con mucha experiencia, David Belenguer, del equipo rival, que estaba tan metido en el partido, que nada más producirse la jugada sabía que el gol no era válido y, sin separarse del árbitro en ningún momento, no perdió ni un segundo, mantuvo la cabeza fría y comenzó a fabricar la venganza. La venganza de un partido que se le quedó atravesado en la primera vuelta, el partido de ida en el Coliseo Alfonso Pérez, en el que el Getafe no pudo sacar nada de provecho tras 22 ocasiones de gol. Anoche, rentabilizó al máximo uno de los despistes más grandes de la historia de la Liga española. Y digo esto porque no fue de un solo jugador: fueron 8 los que se agruparon en la celebración, fueron del Real Madrid, fueron del líder de la liga, fueron de jugadores que juntos casi valdrán lo que cuestan las acciones de varios clubes juntos de primera división.
Pero quiero hablar de la reacción del hombre que más rentabilizó esa experiencia. Belenguer, un tío curtido en mil batallas, que mil veces ha repisado todos los campos de primera y segunda. Y que curiosamente, la única vez que disputó un partido en otra división que no fue esa fue el año de su comienzo en el fútbol profesional: 1992. Pero no es eso lo curioso, lo curioso es que este chico nacido en un pueblo barcelonés, debutara como profesional en el Real Madrid C.
Seguidamente, su trayectoria a lo largo y ancho de la península: Palamós, Leganés, Vigo, Lleida, Albacete, Almendralejo, Sevilla y, por fin, Getafe, donde más años ha pasado. Donde a sus 35 años, siendo perro viejo en esto del fútbol, conociéndose la Liga de pé a pá, anoche pegó el primer impulso a un balón que ha hecho que la liga pegue un vuelco. Un futbolista más habituado a convivir con los típicos problemas de los clubes modestos en los que ha estado, anoche puso de su parte para que la liga pegue un vuelco. Un tío que ha estado durante años en la órbita de la selección, pero sin llegar a ser convocado, el gran capitán del Eurogeta, anoche la lió de la manera más sencilla: cabeza fría y a correr.
Y es que hay veces que la experiencia es un grado, y hay veces que además son tres puntos.